Fragmento Capitulo 4 de Soy Yo
Observo a Seiya con temor, jamás había visto en aquellos ojos la desconfianza que ahora veía en el, el jamás había tomado su brazo con aquella fuerza
-"Soy Yo"- contesto ella con la voz vacilante pero a el no le parecío la respuesta, la acerco aun más a él.
-"Quien eres y donde esta Serena"-
Molly los observo sin entender nada
Mientras Serena intentaba liberarse de aquellos brazos, y las lagrimas corrían libres por sus mejillas
-"Soy Yo, Serena Tsukino"- grito logrando soltarse del agarre del brazo del chico
-"Tu no eres la Serena que conozco"- dijo el chico aun mirándola fijamente, duramente
-"Ni tu el Seiya que yo conozco"- dijo ella empezando temblar de nuevo -"No entiendo nada, donde estoy Seiya?"- pregunto
El chico la miro sin entender, era verdad podía ver la verdad pintada en aquellos ojos celestes, podía observar que realmente ella decía la verdad, pero no terminaba de entender lo que pasaba ahí, era obvio que no se trataba de la Serena que el conocía, habia cambios sutiles en su rostro, en su
cabello e inclusive en su voz, pero... si no era la Serena que conocia quien era entonces? , la observo más fijamente si eso era posible, encontrando que la mirada llena de desesperacion le estrujaba el corazón de las misma manera en que lo habria hecho en el rostro de la verdadera Serena.
Pero no tenia tiempo para dejarse llevar por ojos abnegados de lagrimas, para voces llenas de pena, ni expresiones de sufrimiento
-"Vamos"- dijo y la tomo ocn fuerza de ls muñecas arrastrandola
por las calles que a Serena se le antojaban más y más frías a cada paso que daba
Pero no sew sentia con fuerza suficiente como para imponerse al joven, se sentia perdida, confundida, asustada, sola y desesperada y aquella mezcla de emociones no era para nada buena, aspi que lo unico qiue podia hacer era seguir al chico con docilidad. intentando dejar de pensar, sin lograrlo realmente.
Como era posible que Seiya estuviera ahí, como era posible que se conocieran desde niños, nada de eso encajaba en su mente y para empeorar las cosas habia comenzado a nevar con más fuerza qeu antes, dejo qeu su vista se posara en las pantunflas de hamster, completamente mojadas.
Luego de lo que a ella le parecieron horas, llegaron frente a un edificio de depertamentos, Seiya no había soltado el agarre que tenia en su muñeca así qeu ella no pudo nergarse cuendo el la arrastro hacia uno de los elevadores.
El departamento era encantador y reconfortante, contrastando enormemente con el frio del día, Serena observo confundida las fotografias que adornaban la pared, en todas ellas aparecia un sontiente Seiya en compañia de los que parecian sus padres, Serena no pudo evitar fruncir el ceño al reconocer en el hombreque abrazaba al pequeño Seiya como Zafiro Black, el hermano de
Diamante.
Y su sorpresa se incremente aun más al notar al propio Diamante en una de aquellas fotografias, con los que pudo reconocer como Yaten y Taiki de pequeños. y entonces se observo, era ella de pequeña, y al mismo tiempo no era ella, tenia una batita rosa y estaba al lado de Seiya quien estaba vestido completamente de azul, cada uno en brazos de sus madres, Serena observo qeu la
mujer que tenia entre sus brazos a la Seiya, era Petz, una de las mujeres que habian llegado junto con Rubeus.
Se llevo las manos a la cabeza completamente confundida, antesde dejarse caer en uno de los sillones, había entrado a la dimension desconociada y no tenia la menor idea de como salir de ahí.
Fue en ese momento cuando recordó el cristal de plata, se puso de pie bruscamente buscandolo con urgencia entre sus ropas.
¡No estaba! ¡El cristal de Plata no estaba!
X - X - X
Miedo, incertidumbre, confusion, dolor todo eso se agolpaba en su interior, mientras aquellas pupilas encendidas en furia las miraban fijamente, intento recuperar el aplomo, pero le fue imposible por qeu la situacion la superaba por mucho.
Gatos que hablaban, cristales que desaparecian, gente que nunca habia visto en su vida, todo eso estaba mal
-"Me lastimas"- gimio observando las pupilas encendidas en furia del hombre que hasta hacia unos minutos la habia mirado amorosamente
-"Darien sueltala"- ella no reconocio a aquien pertenecia la voz, sin embrago agradecio internamente cuando el hombre la solto
Darien se giro completamente desesperado, antes de llevarase las manos al cabello despeinandose por completol y despues, estampar su puño contra la pared de la habitacion, mientras mascullaba un par de maldiciones
-"A mi tampoco me gusta la situacion"- se animo a decir, sintiendo más que observando las miradas de todas las mujeres en la habitacion
-"Donde esta mi novia?"- Darien no se habia vuelto a mirarla, sin embargo ella pudo sentir la desesperacion en su voz
-"No lo se"- contesto ella simplemente, comenzando a calmarse y a recuperar la calma, lo que tania que hacer era encontrar una manera de salir de aquel lugar -"Pero es obvioq eu yo o pertenezco aqui"- susurro observando mejor la habitacion, sin pretar atencion alas mujeres.
No definitivamente esa no era su habiatcion, y al mismo timepo lo era, eran las mismaas repiosas era su mismo armario, pero los decorados eran por mucho muy distintos, ni que decir que las fotos qeu habia en su mesa de noche, observo fijamente una de aquellas fotos, era una foto grupal, ella y
aquel chico se encontraba enmedio de la foto, el rodeandola por los hombros y ella sonriendo feliz, se observo fijamente.
Definitivamente la chica que sonreia desde el papel no era ella, por mucho que se parecieran.
-"Ella es tu novia"- pregunto al fin tomando la foto de la mesita y mostrandola
-"Esa eres tu, Serena Tsukino"-
Serena observo a Amy ante aquella informacion, aquella extraña que sonreia desde la foto tambine tenia su mismo nombre
-"Yo soy Serena Tsukino, pero no soy ella"- contesto ella calmada -"Yo tengo 19 años, estudio derecho en la universidad de Tokio, mi gata no habla, definitivamente mi cuarto jamas a tenido tapiz de conejo y ..."- levanto la mano para despojarse del anillo -"No tengo novio"-
-"Eres Serena Tsukino, tienes 19 años, estudias periodismo y vas a casarte en dos semanas"-
Serena observo a reí fijamente
-"Yo no voy a casarme"-
-"Creo saber qeu es lo que esta pasando aqui"- Artemis quien todo el tiempo se habia mantenido en silencio salto a la cama para que todos pudieran oirlo, Serena se levanto de un brico alejandose lo más posible del gato
-"Que pasa Artemis"- dijo Darien, mirando de reojo la reaccion
de la chica
-"Esto es igual a ese cuento, Alicia en el pais de las maravillas"-
-"Definitivamente yo no segui a ningun conejo"- dijo Serena observando al gato al parecer más calmada
-"Yo creo más bien, que se trata de alicia atraves del espejo"- escucharomn una voz desde la puerta
ahí impasible como siempre se encontraba Sailor Plut
-"Plut"- murmuraron todas a excepcion de Serena que observaba a la mujer fijamente, por que el rostro se le hacia tremendamente familiar
-"Chicas"- saludo la guardiana antes de posar su vista en las celestes de la joven
-"Setzuna Meiou"- susurro esta cuando al fin pudo reconocerla -"Pero de que demonios estas disfrazada?"- solto mirandola aun más fijamente
-"Efectivamente Soy Setzuna Meiou, pero no estoy disfrazada de nada, Yo soy la gurdiana del tiempo"-
Serena fruncio el ceño
-"Yo que sienmpre crei que eras una analista politica o al menos eso fue lo qeu dijiste en la ultima conferencia, eres bastante famosa como para estar con esos juegos no te parece"- Serena se sento en la cama nuevamente, poniendo especial cuidado en estar a una distancia prudente de ambos gatos
-"Esa es la Setzuna Meiou de tu espacio, yo soy Sailor Plut"- susurro la guardiana
-"De mi espacio?"- pregunto la chica
-"Es obvio que este no es tu espacio, al parecer nuestra princesa y tu intercambiaron mundos"-
Serena la observo fijamente, sin saber que era lo peor, que aquella mujer dijera que ella habia intercambido su mundo o que ella creyera en sus palabras
X - X - X
-"Tomalo"- no era una sugerencia era una orden y Serena estaba
demasido conmosionada como para nergarse
Estaba en un lugar que definitivamente no era el Tokio que ella conocía, y el cristal de plata habia desaparecido, y aun cuando se encontraba con Seiya y Molly se daba cuenta de que no se sentia segura por que ellos no eran los chicos que ella llamaba amigos.
Sentia Panico, pero estaba completamente segura de que no podía ir a ningun otro lugar, bebio un sorbo de aquella bebida que le ofrecian
-"No llores"- Se sobresaltpo al sentir los dedos de molly limpiando sus lagrimas, aun que ella no se habia dado cuenta del momento en que se hbaia puesto a llorar de nuevo, pero como no iba a llorar si toda esa situacion se estaba saliendo de su comprencion, se sentia perdida y tenia
miedo, no pudo evitar aferarse a la castaña para llorar aun más amargamente.
-"Calmate por favor"- esa era la voz de Seiya, amable si, pero carente de la calidez qeu siempre habia puesto a sus palabras
Nos falta poco para publicar el capitulo, ¿que opinan?
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